Para garantizar que los productos cumplen las distintas normas, es importante contar con una gestión de muestreo eficaz. Es fundamental tomar todas las medidas necesarias para evitar la contaminación durante la toma de muestras, pero también para mantener el estado del producto muestreado durante su manipulación y almacenamiento hasta el laboratorio de análisis (almacenamiento en cámara, refrigerado o congelado, según el caso).
Estos esfuerzos continuos son esenciales para garantizar la calidad de las muestras y la validez de la interpretación de los resultados analíticos. Seguir protocolos probados ayuda a proteger la integridad y la reputación de una empresa y su negocio si los productos llegan a ser objeto de acciones legales.